De esta forma la iniciativa, que estuvo años estancada en el Congreso Nacional, está ad portas de convertirse en Ley de la República ya que ahora sólo resta que se pronuncie el Senado.
Entre los principales puntos destaca la incorporación del deber del Estado de garantizar que no exista discriminación arbitraria. También se modificó el inciso tercero del mismo artículo 2 al aprobar la supremacía de las garantías constitucionales para resguardar el derecho de libertad de enseñanza, de culto y otros, eliminándose la expresión “siempre”, para que no queden dudas de la debida ponderación judicial.
Además se dejó establecido que cualquier delito impulsado por una situación de ideología puede ser considerado una agravante por el juez.
“Dentro de todos los problemas que este proyecto tiene tras la comisión mixta quedó un proyecto mejor de lo que ingresó”, comentó el diputado Aldo Cornejo (DC).
A juicio del diputado Alberto Cardemil (RN)la iniciativa "contiene normas que impiden extrapolar esta ley a situaciones para la cual no está prevista, queda protegido el matrimonio entre un hombre y una mujer, el derecho a la vida del que está por nacer”.
“La ley que salió es un aporte al país, es la solución de un problema que hace siete años que está bajo análisis, el Gobierno se ha movido en la línea correcta y con eficacia, sus indicaciones han sido buenas”, subrayó.
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